Matame si no te sirvo

Estaba en Facebook haciendo idioteces (otra cosa en Facebook no se puede hacer) y me apareció un ad a la derecha de la pantalla con el título "Chicos". Una propuesta similar a Papurris, me imagino. No es que no soporté no ser original: lo que no soporté fue la foto que salió.

¡Josh Hartnett, por Dios! Hay cosas en esta Tierra que desestabilizan y Josh es una de ellas. Cuando una lo ve, es inevitable arrojarse al piso, rodar como un futbolista herido y autoflagelarse. O dan ganas de saltar de una cornisa. No se resiste.

Lo que especialmente resulta irresistible es la última publicidad de Emporio Armani que filmó este maldito yeguo. Me encanta cuando estos idolitos teen pasan la barrera de los 30 y se les ensancha la cara. Josh está más arrugadito y se va pareciendo a Josh Brolin, el vaquero de No country for old men. Creo que conforme avance su edad, se parecerá cada día un poquito más.

Igual esto no es lo que quiero comentar. Lo que debe resaltarse es lo tremendo que está este tipo y punto.

Hay en la vía, sobre Virrey Vértiz, muy cerca de la estación de Barrancas, una publicidad gigante donde este papurri está siendo acosado por flashes y una chica top, todo divino en su traje, sonriendo con picardía. Pasamos por ahí en el auto de mi marido y, sin dejar de mirar el mega poster, le dije:

- Si yo estuviera manejando, habría chocado.

Dejen sus comentarios.

Hasta la próxima.

Aquí, Josh super partido y la publicidad de la que hablo. Mi cabeza choca contra el monitor.